Local decorado en tonos azules que le da un cierto aire marinero y relajante. Sus paredes combinan el azul con columnas de piedra y manteles de color claro. En definitiva un ambiente acogedor e íntimo…Jesús, el camarero nos recibió con una cordial bienvenida y nos dispensó un trato exquisito: atento y amable pero guardando siempre las distancias… Este es el tipo de camarero que siempre deseamos encontrar cuando salimos a cenar y que desgraciadamente escasea tanto hoy en día. Y qué mejor que complementarlo con un buen chef, Victor, un chico de origen sudamericano que cocina a las mil maravillas.